Después de que Confucio lo consultara sobre ese punto de su vida, se cita a Confucio diciendo que aprendió el Camino del Cielo.
Fue entonces cuando Confucio comenzó a centrarse en la enseñanza.
Los discípulos de Confucio se inspiraron para proporcionar un registro de él.
También se inspiraron para continuar y transmitir una filosofía muy profunda, vivificante, y práctica que le atribuyeron.
Confucio estudió, y compiló y editó copias de los libros clásicos, como el Libro de Poesía (Wu 2002), que todavía se usan hoy y que reflejan aún más sus valores.
Confucio y sus discípulos también estudiaron y comentaron sobre el I Ching; Este comentario se conoce como las Diez Alas.
Al aclarar la filosofía del Camino del Cielo y la capacidad de la humanidad de manifestar ese Camino en la Tierra en estos comentarios, Confucio y sus discípulos mejoraron enormemente la comprensión del I Ching.
Oigamos el relato…