Se escogen 50 troncos de artemisa, varillas de milenrama o aquilea perfectamente redondeados .
Se retira uno. Este es en sí mismo la unidad más allá de la cual tienen lugar las permutaciones de la Creación, es el Tai Chi.
De modo que es el Testigo del Cielo ante el cual se ejecutan las manipulaciones de las varillas.
Es un sistema que asegura que sólo intervendrá la energía del consultante.
Esta varilla debe recibir un trato ritual, considerado y conceptuoso, pues representa lo que está más allá de lo creado y sin embargo lo que integra el haz completo de la creación.
Quedan entonces 49 varillas.
Reparemos en el relato…